El presidente Raúl Castro anunció este viernes un inminente indulto por razones humanitarias para casi 3.000 presos, 86 de ellos extranjeros. El contratista estadounidense, Alan Gross, no estará entre los indultados, según anunciaron autoridades en la isla.
"Manifestamos la disposición de conceder la excarcelación anticipada a 86 ciudadanos extranjeros de 25 países, incluidas 13 mujeres (...) bajo la condición previa de que los gobiernos de sus países de origen acepten la repatriación", dijo el mandatario.
El presidente señaló que la medida que beneficia a "más de 2.900" presos cubanos, se toma como un gesto "humanitario y soberano" de Cuba y comprende a mujeres, enfermos, personas con más de 60 años, y jóvenes que han superado su nivel cultural en las prisiones.
Añadió que se excluyen, "salvo contadas excepciones, sancionados por delitos de espionaje, terrorismo, asesinato, homicidio, tráfico de drogas, pederastia con violencia, robo con fuerza en vivienda habitada, violación y corrupción de menores".
"No obstante, serán puestos en libertad algunos condenados por delitos contra la seguridad del Estado. Todos han cumplido una parte importante de la pena en prisión y mostrado un buen comportamiento".
El contratista Gross fue detenido en diciembre de 2009 por suministrar supuesta tecnología sofisticada de internet ilegalmente a personas en Cuba y condenado a 15 años de prisión, por "delitos contra la seguridad del Estado".
El mandatario cubano señaló que este indulto se concede por petición de los familiares de los presos, las iglesias católica y protestante, así como ante la próxima visita en marzo del papa Benedicto XVI.
El indulto, el mayor de los 53 años de revolución, se aplicará en "los próximos días" y supera ampliamente el dictado un mes después de la visita del papa Juan Pablo II, en enero de 1998, que comprendió 299 presos
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