Preocupación por la situación en las aguas del estrecho de Ormuz donde la Marina iraní está realizando maniobras y que ya ha amenazado con cerrar en caso de que se impongan nuevas sanciones contra el país y ha pedido que se estabilice esto lo manifesto gobiernos de China y Rusia, en medio de advertencias por parte de Estados Unidos acerca de posibles acciones para evitar su clausura.
El portavoz del Ministerio de Exteriores de China, Hung Lei, ha indicado que su país "espera que la paz y la estabilidad se mantengan en el estrecho" y ha subrayado que la opinión pública china es muy sensible a los eventos que tienen lugar en Irán.
Tambien el embajador ruso ante Naciones Unidas, Vitali Churkin, ha apuntado que su país está "extremadamente preocupado" por la situación actual en el golfo Pérsico y la escalada de tensiones entre Irán y Occidente, "es un escenario muy peligroso", dijo Churkin, que ha puntualizado que, para evitar graves consecuencias, ambas partes deben buscar una solución pacífica a través de las negociaciones, y dijo que Moscú "no acepta el argumento de que la mejor manera de evitar una guerra es empezando una guerra". Afirmo, ademas Irán debería continuar las negociaciones con la Agencia Internacional de la Energía Atómica (AIEA) sobre su programa nuclear y retomar las conversaciones con el Grupo 5+1 formado por Estados Unidos, Rusia, China, Francia, Reino Unido y Alemania-- para llegar a una solución.
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