Desde que el crucero Costa Concordia naufrago y su capitán Francesco Schettino esta bajo arresto y acusado de ser el principal culpables del accidente, jueces y fiscales de la isla de Giglio no ha podido dormir tranquilos, pensando cual de la versiones del capitan sera la verdadera, pero al parecer ya ese tormento ha terminado porque al capitan le quedo bien el dicho "MAS FACIL SE ENCUENTRA UN MENTIROSO QUE A UN COJO" (no dicimos ni diremos que las persona con esta discapicidad tengan semejanza con el capitan) y esto fue lo que se descubrio en una grabacion de la conversación telefónica interceptada por la policía que ha traicionado al capitán del "Costa Concordia", Francesco Schettino y ha llevado a los letrados a una conclusion.
Al día siguiente del naufragio, cuando se encuentra en el cuartel de los carabineros, habla con amigos y colegas desde una habitación llena de micrófonos espías, cosa que es normal y lo hacen así a menudo los carabineros, para *robar* confesiones de los sospechosos, Sus afirmaciones son clarísimas y confirman los errores y su decisión de abandonar la nave, aunque era consciente de que aún había cientos y cientos de personas por evacuar.
"Me caí sobre un bote salvavidas y no logré subir de nuevo a bordo", había declarado al juez. Pero, a las pocas horas de la tragedia, y sin imaginar que su conversación está siendo grabada admite: "Cuando la nave ha comenzado a inclinarse, me bajé".
Ademas alega que "para satisfacer al "mánager"…pasa por aquí, pasa por allí…, y yo he pasado". No queda claro si Schettino se refiere al maitre de la nave, al que iba dedicado el saludo a la isla de Giglio, o a un mánager de la naviera Costa Cruceros, propietaria del Concordia. El mismo capitán Schettino ha admitido ante el juez que la compañía programaba los saludos, acercándose a la costa, para hacerse publicidad.
"Tendrán que ser los más altos ejecutivos de la naviera los que respondan de esta tragedia, y no solo desde el punto de vista civil". Fueron las declaraciones de la abogada y diputada Giulia Bongiorno, que emprenderá una acción penal contra la compañía del Concordia, representando a más de 30 pasajeros y otros muchos han anunciado su intención de adherirse a la iniciativa.
La abogada Bongiorno se hizo célebre como defensora legal de Giulio Andreotti y recientemente en el caso del asesinato de la escocesa Meredith, logrando que los dos principales acusados, la americana Amanda Knox y el italiano Raffaele Sollecito, fueran declarados inocentes.
No hay comentarios :
Publicar un comentario