viernes, 6 de enero de 2012

Las focas arpa del Atlántico Norte en la cuerda floja


 El calentamiento del Atlántico Norte durante los últimos 32 años ha reducido significativamente la cubierta de hielo en zonas de cría de focas arpa Pagophilus groenlandicus, resultando en las tasas de mortalidad más altas entre las crías de foca de los últimos años, según un nuevo estudio dirigido por la Universidad de Duke. 

 "El tipo de mortalidad que está teniendo lugar en el este de Canadá es dramático, y pone en peligro la capacidad de recuperación de la población de focas", ha destacado el investigador en el Laboratorio Marino de la Universidad de Duke, David W. Johnston.


 El estudio es el primero en mostrar que la cubierta de hielo marino estacional, en las cuatro regiones de cría de focas arpa en el Atlántico Norte, ha disminuido hasta en un 6 por ciento por década desde 1979 año en que comenzaron los registros por satélite. Las focas arpa necesitan hielo estable en el mar durante el invierno para dar a luz y amamantar a sus crías, hasta que éstas puedan nadar y cazar por su cuenta. Las focas hembras suelen buscar las placas de hielo más gruesas y antiguas en las aguas subárticas.
 También compararon los datos con la Oscilación del Atlántico Norte (NAO, por sus siglas en inglés), un fenómeno climático que controla la intensidad de los vientos del oeste y las tormentas, que afecta en gran medida al clima de invierno y a la formación de hielo marino,  estos análisis revelaron que el aumento de la mortalidad de las crías se produjo en el noroeste del Atlántico en los años en que la capa de hielo fue más ligera, y la NAO más débil.
 Los investigadores se preguntan si las focas serán capaces de responder a esta tendencia a largo plazo, moviéndose a otros hábitats, donde el hielo sea más estable. Informes recientes indican que algunas focas arpa han buscado nuevas zonas de reproducción en el este de Groenlandia, lo que indica que algunos cambios están teniendo lugar, aunque, por otro lado, miles de focas siguen regresando cada año a las zonas tradicionales de cría, en el Golfo de San Lorenzo o en la isla de Terranova, a pesar de las condiciones del hielo.

No hay comentarios :

Publicar un comentario